El legendario Jorge Manzanares
Benavides falleció, pero sus recuerdos como boxeador y entrenador se mantendrán
vigentes. Destacó en el ring en los años 50 y 60, hizo 50 peleas como
aficionado y todas las ganó, luego pasó a ser profesional con un total de 52
combates, 46 victorias y solo seis derrotas.
En 1955 fue declarado el boxeador del
año en Centroamérica. En 1962 se retiró como atleta y se dedicó por más de dos
décadas a entrenar pugilistas de la talla de Orlando Hernández, Humberto
Aranda, David Garro y del actual presidente de la Asociación Costarricense de
Boxeo, Rafael Vega. Dirigió a la Selección Nacional de boxeo por años, visitó
más de 12 países y se ganó el respeto de todas las esquinas del continente.
Además del deporte de los guantes practicó
softbol y lucha libre. En aquel entonces lo llamaban la “Maravilla” tica.
Su apodo del “Tigre” dentro del boxeo
data porque en sus tiempos mozos solía rugir antes de cada entrenamiento y
pelea. Tenía buena pegada y una agilidad para esquivar golpes.
En 1961 y 1962 recibió el galardón de
mejor boxeador por parte del Círculo de Periodistas y Locutores Deportivos de
Costa Rica. Es miembro de la Galería del Deporte.
Falleció a los 80 años de edad en
Hatillo.
Boxeo de JDN de luto
La noticia de la muerte del conocido
“Tigre” caló hondo en las diferentes delegaciones de JDN 2019, pues muchos de
los entrenadores conocieron a uno de los grandes maestros del boxeo en el país.
El presidente de la Asociación
Costarricense de Boxeo (Acobox), Rafael Vega, admitió que Manzanares fue su
mentor y que gracias a él es que está hoy en el deporte de los guantes.
“Manzanares fue quien me trajo al
boxeo, él me dijo que tenías las condiciones, a él le debo mucho de lo que fui
como boxeador y sobre muchas cosas que aprendí de él, la disciplina, el
respeto, recuerdo que era un hombre que siempre nos decía campeones, que no nos
permitía escupir, que nos decía que siempre había que llevar la toalla, un gran
ejemplo para muchos y fue entrenador de grandes boxeadores”, dijo Vega con
mucho pesar.
El jerarca indicó que la tristeza lo
inunda, pero que ahora deberán concentrarse en sacar esta fase final de Juegos
Nacionales que inicia hoy y finaliza el sábado. “Nos duele bastante, pero
debemos seguir, cumplir con las competencias y elevar una plegaria al cielo”.
Uno de los hijos de esta gran figura
del boxeo se encuentra registrado en la esquina para estar en las justas
nacionales, don Jorge Max Manzanares.
El “Tigre” dejó un legado.
Comentarios
Publicar un comentario